El mundo LGTB cuenta desde ya con dos nuevos símbolos: los personajes infantiles Gayskelly y Spaggaytti, creación de Enrique del Pozo, director a su vez de un reivindicable documental,
The Pink Wall, clarificador testimonio sobre las barbaridades que los homosexuales han sufrido en nuestro país. Del Pozo, mucho más que el personaje catódico conocido por todos, artista emprendedor y polifacético, ha ideado estas dos graciosas mascotas que se encuentran ya a la venta en un variado merchandising: muñecos, llaveros, camisetas... El concepto, atrevido, que rompe tabús y rígidos esquemas, pretende, como se asegura desde
la web, contribuir a "la normalización social y empresarial". Aunque Gayskelly y Spaggaytti representan al mundo LGTB, y quizás aquí encuentren a sus compradores potenciales, los personajes tienen que ir más allá del colectivo como herramienta, efectivamente, para una tolerancia que debe inculcarse desde la infancia.
