Una flor para Jorge Rigaud (1)

Hacía mucho tiempo que tenía ganas de acercarme al cementerio de Leganés para visitar la tumba del actor Jorge Rigaud (también conocido como George Rigaud), fallecido en circunstancias no del todo aclaradas y especialmente tristes el 17 de enero de 1984. Quería dejarle una flor...

Rigaud murió solo en  el Centro de Asistencia Médico-Geriátrica de Leganés dos horas después de que fuera dado de alta, contra su voluntad, en el Hospital Provincial de Madrid, adonde había sido trasladado días atrás después de que se desmayara en la calle Doctor Esquerdo (se da el caso de que el día antes del desmayo, el 10 de enero, había sido atropellado en la Gran Vía por una motocicleta con resultado de contusión en pierna izquierda). Al apuesto Jorge Rigaud, que de estar vivo bien podría haber participado en Contra el tiempo, ya que fue muy prolífico en el cine de género, se le recuerda especialmente por su papel de San Valentín en El día de los enamorados (Fernando Palacios, 1959) y Vuelve San Valentín (Fernando Palacios, 1962). Los medios de comunicación de entonces informaron de su enterramiento en el cementerio de Leganés.

Sin rastro

Aprovechando que ayer fue el Día de los Difuntos, que vivo cerca y que tenía algo de tiempo, me acerqué al viejo cementerio de Leganés con la idea de que en sus oficinas me indicaran la tumba de Jorge Rigaud, pero el intento fue infructuoso. Hablé con el enterrador, muy amable, que trabaja allí desde hace décadas. No le sonaba ningún actor enterrado allí, pero sí un especialista de cine, "de los que hicieron películas del oeste según me dijeron", al que dieron sepultura en ese cementerio precisamente en 1984. Por lo que pude hablar con el enterrador casi diría que estábamos mencionando a la misma persona y que a él en su momento no le dieron la información del todo exacta. De ser ese "especialista" el actor Jorge Rigaud, lo que sí recordaba con exactitud mi interlocutor es que estaba en una tumba temporal y que, llegado el momento, sus restos se exhumaron. O sea, que si ese era Rigaud ya no hay restos del actor (no creo que nadie los reclamara, ya que el actor vivió solo en sus últimos años, sin contacto con sus familiares salvo una lejana sobrina). Desistí de dar una vuelta por el cementerio por si finalmente ese especialista no era Rigaud y me topaba con su tumba, pero dejé este intento, arduo intento, para otro día. Desgraciadamente en la oficina del cementerio no tenían archivos de esos años y me remitieron a una oficina central en Leganés que aún tengo que visitar. Si se me aclara que Jorge Rigaud estuvo allí enterrado y que sus restos han desaparecido, mi intención será, pues, la de que se ponga una placa en el cementerio en su memoria. Ya os iré contando... De momento os dejo con este enlace a un esclarecedor texto de José Luis López Vázquez en El país pocos días despúes de la muerte de Rigaud: "El recuerdo de Jorge Rigaud".

© José Manuel Serrano Cueto.